17 de noviembre de 2010

Nunca subestimes el poder de una salchicha

¿quién podría resistirse a una salchicha gigante que te saluda con un guiño y te dice que está riquísima con el pulgar de su brazo-mostaza?

El pasado verano nos desayunamos una auténtica bratwurst alemana atraídos por el reclamo. Y éste hizo justicia. Estaba buenísima!

El letrero reza algo así como: Última salchicha antes de partir hacia América. Algo muy lógico, teniendo en cuenta que estaba en la punta de San Vicente en Portugal.


4 comentarios:

ginés dijo...

...ostia, me recuerda a un cuadro de Curro Gonzalez que colgué hace años en Sevilla: "La última salchicha americana"Te paso un enlace cutr donde se puede "ver"
http://www.oronoz.com/paginas/leefoto.php?referencia=189331&usuario=

ginés dijo...

...ostia, me recuerda a un cuadro de Curro Gonzalez que colgué hace años en Sevilla: "La última salchicha americana"Te paso un enlace cutr donde se puede "ver"
http://www.oronoz.com/paginas/leefoto.php?referencia=189331&usuario=

Fran dijo...

Mirala que salada la salcihcha, si hasta parece una odalisca!!!

JULIO FALAGAN dijo...

Qué grande, Ginés!
Ahora me gusta mucho más aún!