En Salamanca el jamón iberico se sienta a la mesa como uno más de la familia. Incluso, emite juicios de valor más certeros que los de los propios padrinos de cada respectivo hogar.
El jamón tiene en Salamanca tratamiento de concejal de municipio, por lo menos!
Por lo tanto, no es raro que se le rinda culto en cada rincón de esta ciudad. Ejemplo de esto es el caso de esta carnicería que hay junto al Corte Charro Inglés, en el antiguo tramo de Federico Anaya, ahora extensión de María Auxiliadora por capricho de Isidoro Álvarez y bendecido por Julián Lanzarote.
Parece que el ninio se dijera de modo reflexivo: ¡Ay, que rico soy!¡Ay, que me como!
1 comentario:
¡Eso son lonchas y no lo que se metian Las Grecas!
(comentario reciclado, que es mu bueno reciclar)
Publicar un comentario